Repetir lo viejo esperando vida nueva es locura.
“Ponte en marcha hacia una tierra que te mostraré” (Génesis 12:1).
Dios llamó a Abraham a lo desconocido, no a lo cómodo. La fe viva innova: encuentra formas frescas de amar, servir, conectar. No se trata de rarezas, sino de relevancia.
Tu ciudad no necesita sermones gastados, sino ideas audaces que enciendan esperanza. El statu quo es un ladrón silencioso; la creatividad, tu arma. ¿Qué harás hoy para romper el molde y mostrar a Dios de forma nueva? El cambio empieza contigo. Sé parte del Movimiento de Ciudad y crea algo nuevo para tu mundo.
