Una ciudad saludable
Una ciudad saludable no es obra de un solo sector, sino de un ecosistema de liderazgo que entiende el poder de la colaboración y la unidad.
Una ciudad saludable no es obra de un solo sector, sino de un ecosistema de liderazgo que entiende el poder de la colaboración y la unidad.
Los líderes de ciudad priorizan la cooperación sobre la competencia elevan el impacto de sus organizaciones y mejoran su entorno.
Es gestionar relaciones, alinear intereses diversos y cultivar confianza en medio de la complejidad.
La fuerza de un líder radica en su capacidad de crear una visión compartida y movilizar a su equipo hacia la acción
Es aquel que inspira a otros a colaborar, a dar lo mejor de sí mismos, en un esfuerzo común por construir una ciudad más unida y conectada.